2.11.08

fobias

al enterarse de que también existían las escaleras eléctricas, además de las sillas del mismo apellido, aquel niño suspiró con descomunal gozo. debido a una de sus tantas fobias, gestaba la esperanza de que si, el rumbo se torcía, no tendría que morir sentado

1 comentario:

PROSÓDICA dijo...

En movimiento, sin duda alguna, aunque sean movimientos rectamente torcidos.